jueves, 8 de mayo de 2014

Jotaele Andrade - el oro de aquello que se fuga


 
 
Dormiré en una lengua que me desconoce

 dedicado a M. J. F

 
me dormiré contigo

en el olvidado color de tu ojo

 

en tu manera de mover los hombros

como si te costara

atravesar el aire

 

dormiré con las manos

atadas

para no traerte quién sabe de qué mundo

o qué planeta

 

no existe el sueño

 

existen melodías

y el pez

 

existe la magnolia

y la obstinada ternura de las cosas

 

existe uno

a medias

en sí mismo

 

pequeña

 

apenas puedo sostener mi vida en el asedio de tanta milagrura

en la lentitud del caracol

en el gorjeo dominical de las palomas

en el hueco desdentado de la angustia

 

contigo no funcionan las magias

 

no existe la magia

 

existe el crudo olor de la belleza

 

y el zumbido y el miedo

 

la muerte

la vida

y el misterio de ambas

esa joya encerrada en la mano del verdugo

 

me dormiré contigo

en el color olvidado de tu ojo

 

hasta cantar en un lengua que ya no comprendo

y que se dice en mí

en el gemido de un tallo que se quiebra

 

 


 

       La ganancia de un hombre

 

he ganado conmigo

la reliquia dudosa

del estremecimiento de la mano rozando el oro de aquello

que se fuga

 

y he perdido conmigo la majestuosa corona de la espuma

arriba de la ola

la algarabía del bosque y el estruendo de la gota al estrellarse

 

pocas cosas gana un hombre

acaso su polvo

pero ya se ha desvanecido para entonces

 

ni siquiera la materia en que su historia se escribe

 

pero tú no saldrás de mi amor

hasta que el día reviente su caballo

 

 

 

 

 En toda catástrofe hay un milagro

 

mientras cepillaba mis últimos dientes

y muelas

 

la podredumbre de las caries y de los besos muertos

y las palabras

de amor que no diré nunca

y las otras

enraizadas a lo indecible

 

y la noche afuera era un niño

frío

y caído entre las cosas

 

un cabello sobresalía

colgado de otro cabello

 

es lenta la calvicie

me dije

 

y lento

irse cayendo

entre muelas

cabellos

fatigas

cotidianidades

 

tomé la hebra

frágil

quebradiza

 

qué modo de irse despojando

de uno

pensé

 

mientras lo dejaba caer sobre la blancura del lavabo

 

fue bajando con una velocidad

asombrosa

hacia el mármol

 

una hebra negra y curvada sobre sí misma

cayendo verticalmente

una parte de mí yéndose a estrellar

 

cayendo

como un bólido

hacia un blanco estruendoso

 

y deteniéndose

de un modo abrupto

a unos milímetros del lavabo

 

podría referir

las conjeturas

la búsqueda de razones para semejante espectáculo

 

pero mi corazón gozaba

de ver

aquel cabello

flotando

como si hilos invisibles

lo sostuvieran

 

oh misterio

oh dicha de estos oscuros sucesos

 

para que el poeta diga que en toda catástrofe hay un milagro

 

 

 

 
Se parece al amor

                                      a Analía Marchesano

 

la bombilla de luz

hace semanas que se apaga y se enciende

 

o titila

y el baño

amenaza

constantemente

con ser un territorio

en sombras

 

da cierto resquemor

que el mundo

y uno mismo

pueda

de ese modo

quedar

a oscuras

 

desaparecer

 

no es muy diferente de estar vivo

 

de todos modos la bombilla

luego que parpadea

da una luz más brillante

más intensa

 

entonces digo que se parece al amor

 
 
 
 
Jotaele Andrade. Nació en La Plata en 1974.
Vive en la ciudad de Azul.

Bebe.

Le editaron dos libros. También le editaron un libro de
bolsillo. También una edición cartonera en España.

Bebe.

Escribe porque no se dedicó a ser fontanero.
No tiene máximas favoritas.

No tiene.

A veces bebe.